El ejemplo de Uruguay

Entre los países sudamericanos que menor incidencia tuvo la pandemia del coronavirus está Uruguay, una nación pequeña de 3,4 millones de habitantes, donde se contagiaron más de 2.600 y ocurrieron 53 muertes, cuando sus vecinos como Brasil y Argentina son los más golpeados por la enfermedad, sin ir lejos, Bolivia tiene mayor número de contagiados y más del triple de fallecidos.

Uruguay, no sólo tiene un menor número de contagios y fallecidos que sus vecinos, además su economía no sufrió tanto como la de otros países, porque sus gobernantes idearon un plan de acción para evitar el colapso tanto económico como de salud.

Las medidas de contención del virus fueron más efectivas que en otros países, los factores que citó un experto del Fondo Monetario Internacional, FMI, son los siguientes: empoderamiento a los entes científicos responsables, seguir los protocolos recomendados por los profesionales médicos, y tener una amplia cohesión social y un importante nivel de credibilidad de las autoridades.

Las recomendaciones, que se escucharon a través de los medios de comunicación eran que se vaya a sufragar, sin tocar el ánfora, llevar su propio bolígrafo, desinfectarse al entrar y al salir, además que los jueces electorales debían desinfectar previamente los documentos al devolverlos. Todo eso se cumplió dentro de los recintos, pero luego cada ciudadano debía retornar a su domicilio y permanecer allí hasta que concluya el proceso.

Sin embargo, la gente no sólo acudió a sus recintos a sufragar y se quedaron allí, sino que también llevaron a sus niños, muchos de ellos sin medidas de protección de ninguna clase, además exponiéndolos a que fueran atropellados, pues los llevaron con triciclos y otros carritos impulsados a pedal, hasta las avenidas principales por donde suelen transitar los vehículos de emergencia.

Si los bolivianos fuésemos tan disciplinados como en Uruguay, que dio un ejemplo al mundo, quizás otra sería la historia para el país, en materia de economía y salud, al menos.

No obstante, la población boliviana ya tomó su decisión y eligió a Luis Arce Catacora, del Movimiento Al Socialismo, MAS, como nuevo presidente de la Nación, existe expectativa de saber si su administración será más de lo mismo o hará cambios estructurales en las áreas que se necesiten, como la educación, la salud y la economía.

Arce comenzó anunciando algunas medidas para paliar la difícil situación económica de algunas familias bolivianas, se espera que siguiendo el ejemplo de Uruguay se logre detener el virus, reactivar la economía, realizar mejoras estructurales en ámbitos como la economía, el comercio, salud y educación.