Del lagarto de la mitología al Calvario de Cala-Cala

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Cuenta la leyenda que del Este apareció un gran lagarto enviado por el semidiós Huari, cuyo fin era exterminar al pueblo Uru que no quería someterse al ser infernal y por lo contrario adoraba a Pachacamaj. Al estar prácticamente vencidos apareció en el firmamento una hermosa Ñusta, quien con su espada logró matar al lagarto y convertirlo en una gran roca.

En el ocaso, cuando el sol prácticamente retira sus rayos de la faz de la Tierra, se observa que el agua que rodea al lagarto se convierte en rojiza como si fuese la sangre que sale de su cuerpo.

Ese extracto es parte de la Mitología del Carnaval de Oruro, que según el relato antiguo dio uno de los orígenes a la Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad.

Son 183 gradas que se deben subir para llegar hasta la cima de aquel lugar, muy visitado principalmente en septiembre de cada año, donde se rinde pleitesía al Señor de Lagunas.

Al margen de tener ese paseo por la cima del cerro, los alrededores invitan a efectuar un descanso al aire libre, para acampar, hacer una parrillada, practicar deporte y olvidarse de las preocupaciones por unas horas. En época de primavera y verano es cuando el lugar se pone verde y realmente se convive en un ambiente natural.

Sin embargo, este año a consecuencia de la falta de lluvias es que el lugar aún presentaba un panorama invernal. La laguna y el riachuelo muestran otra faceta del lugar, porque lo hace más atractivo para el visitante.

Para llegar hasta aquel sitio se debe ir hacia Vinto y luego seguir el camino que pasa por la Empresa Metalúrgica del mismo nombre, se pasa por cercanías de Sepulturas y kilómetros más al Este está el Calvario de Cala-Cala.

Fuente: Por: Dehymar Antezana LA PATRIA