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Democracia y elecciones - Periódico La Patria (Oruro - Bolivia)
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Viernes 09 de octubre de 2020

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Editorial y opiniones

Democracia y elecciones

09 oct 2020

Fuente: Por: Ramiro Siles Velasco

Mañana Bolivia celebra treinta y ocho años de vida democrática, después de que Luis García Mesa Tejada ocasionara un cruento golpe de Estado el 17 de julio de 1980. El 10 de octubre de 1982 el Gral. Guido Vildoso Calderón –Presidente de la República de entonces-, entregaba la Presidencia al electo candidato de Unidad Democrática y Popular (UDP), Hernán Siles Zuazo, precedida y acompañada por una masiva concentración ciudadana en la plaza San Francisco de La Paz y la efervescencia social de toda Bolivia en la esperanza de construir un nuevo Estado en democracia.

De esta manera se daba inicio a un naciente periodo democrático en el país. Sin embargo esta prolongada convivencia en democracia se vio quebrantada cuando no se respetó la voluntad del pueblo en el referéndum del 21 de febrero de 2016, que dijo NO a la reelección indefinida a la presidencia del Estado, no obstante se desconocieron los resultados de ese proceso electoral. El descontento del pueblo se incrementó vertiginosamente por la violación continua y permanente a la libertad de expresión y los derechos humanos que dio lugar a la violencia generada como consecuencia de la realización de elecciones generales el 20 de octubre de 2019 con una desatinada organización, administración y ejecución por el Tribunal Supremo Electoral (TSE), actividad efectuada con muchas denuncias de irregularidades durante el proceso de votación, errores en el cómputo nacional e interrupción de la difusión pública, fluida y directa del sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), por un abrupto corte de energía eléctrica y la posterior publicación de datos no creíbles después de 18 horas, confirmándose de esta manera un presunto fraude electoral con la consiguiente anulación de las pasadas elecciones que tuvieron un gasto aproximado de doscientos millones de bolivianos.

Transcurrió un año de este negro episodio en la vida de los ciudadanos y por segunda vez se llevará adelante las elecciones generales con dos características diferentes a) La propagación de la pandemia Covid-19 que alcanza a 138.000 infectados y para el día de las elecciones bordeara 143.000 contaminados. Razón por la cual es imprescindible tomar en cuenta medidas estrictas de bioseguridad: barbijos, guantes y alcohol en gel o al 70%, con el distanciamiento social entre jurados, notarios, y sobre todo en los ciudadanos que acudirán a emitir su voto con atención prioritaria a los adultos mayores. b) Antecedentes de un reciente fraude electoral, desprestigio del Tribunal Supremo Electoral por su profunda contaminación política, motivo de desconfianza en la organización del proceso electoral con trasparencia y eficacia Circunstancias que acrecientan la incertidumbre en la población que se siente atemorizada por la sombra de un presunto fraude electoral y, amenazado con una eventual convulsión.

Por esta razón el órgano rector debe demostrar experiencia, solvencia, idoneidad, claridad y rectitud en la organización administración y ejecución de elecciones aspecto que el soberano puso en duda la última temporada. En tanto tiene que estar establecida que toda contienda electoral se gana en las urnas, mediante elecciones libres, justas y transparentes NUNCA a través de armas, enfrentamientos violencia y conmoción en las calles. Los perdedores deben aceptar con hidalguía los resultados y desde una ocasional oposición contribuir con propuestas para salir de esta crisis. “La democracia se encuentra estrechamente ligado al poder del pueblo por medio de la unidad y articulación de sus habitantes”.

Fuente: Por: Ramiro Siles Velasco
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