Viernes 09 de octubre de 2020

ver hoy












¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...
Hasta que por fin, propiamente al final de la agenda operativa gubernamental, se incluye con presentación oficial ante autoridades y prensa, un proyecto para industrializar el litio del salar de Coipasa en Oruro.
Mencionamos el factor de temporalidad, pues en lo que le queda de funciones al Gobierno de Transición, es poco menos que imposible poner en marcha un proyecto en el que deberá tratarse la industrialización de 25 toneladas de carbonato de litio que anualmente se producirán en Coipasa y que se estima tendrán “grado batería”, que es uno de los insumos especiales para hablar de la futura producción de baterías de ión litio.
La presentación oficial del proyecto constituye un factor de seriedad que puede facilitar en la nueva gestión de gobierno un reclamo orureño para que se active la anunciada instalación de una planta industrial para producir toneladas de la materia prima que se requiere para fabricar baterías que energicen las nuevas unidades de vehículos eléctricos.
Sin duda es una buena noticia, más aún si se trata de una decisión oficial de realizar la operación en el salar Coipasa de Oruro, que se lo mantenía relegado frente a ciertos avances en el vecino salar de Uyuni, donde hay más de tres plantas (experimentales), con fines paralelos a la consolidación de industrializar el litio boliviano, en abierta competencia con los países vecinos, que dicho sea de paso, ya tienen algunas ventajas sobre nuestros lentos planes nacionales.