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Miercoles 30 de septiembre de 2020

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Oruro - Regional

Además del pago de sueldos adeudados

Personal Covid-19 del “Oruro-Corea” en huelga de hambre piden estabilidad laboral

30 sep 2020

Fuente: LA PATRIA

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Personal de salud Covid-19 que trabaja en el hospital Oruro-Corea de la ciudad de Oruro, se declaró en huelga de hambre pidiendo el pago de salarios adeudados desde julio y estabilidad laboral, reclaman que pese a luchar contra el coronavirus en primera línea, hoy fenece su contrato y las autoridades se muestran indolentes.

Esta huelga de hambre es indefinida, de manera inicial son 10 trabajadores Covid-19, entre médicos, licenciadas en enfermería y personal manual, que asumieron esta medida de presión pero los demás se irán sumando en lo que resta de la jornada y la semana.

Son 45 empleados quienes están con esta demanda.

Fueron contratados en primera instancia por dos meses, mayo y junio, por el Hospital General, cuyo sueldo recién fue cancelado hace algunos días y luego firmaron otro contrato por los meses de julio, agosto y septiembre, por el Ministerio de Salud, todavía se adeudan esos salarios.

“Ninguna de las autoridades pertinentes nos explican qué está pasando con nuestros sueldos, ni el Sedes (Servicio Departamental de Salud), del Hospital General, ni de la Gobernación, no sabemos a quién reclamar, todos se pasan la pelotita”, aseveró una de las movilizadas.

Les dicen que no hay recursos para cancelar sus sueldos, pero les extraña que pronto serán reemplazados por un nuevo personal, aparentemente contratados con recursos externos.

En reuniones pasadas a ellos les aseguraron estabilidad laboral en reconocimiento a su esforzada labor durante el pico de la pandemia, cuando el área Covid-19 estaba saturado y arriesgaron hasta su propia integridad por atender a los pacientes críticos.

Pero reclaman que ahora que hay descenso de contagios las autoridades olvidaron sus promesas y discursos.

Incluso les dijeron que una vez finalice su contrato inicial, su estabilidad laboral estaría garantizada.

“Nos sentimos usados, desprotegidos, porque cuando los contagios estaban elevados y los pacientes críticos saturaban nuestras salas, nos dijeron y prometieron otras, pero ahora no hay nada”, finalizó.

Fuente: LA PATRIA
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