Museo Nacional Antropológico “Eduardo López Rivas”

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INTRODUCCIÓN

El antiguo Museo Arqueológico Municipal de Oruro, ubicado en la Zona Sur, de la ciudad de Oruro, (avenida España, esquina Urquidi, junto al mercado Palenque), se funda el 1ro. de noviembre de 1959, en la gestión municipal del Sr. Lorenzo Ramírez Vásquez, junto al Dr. Abel Ramos Solagurem y Oscar Ayaviri como Oficial Mayor de Cultura en cooperación directa del arqueólogo Prof. Luis Guerra Gutiérrez que prácticamente fue el tutor en el manejo museológico durante muchos años, y la valiosa contribución de la investigadora, antropóloga, historiadora Dra. Julia Elena Fortún de la Dirección de Cultura del Ministerio de Educación, en el fortalecimiento del museo mediante la recolección de piezas arqueológicas de la cultura Wankarani, Chiripa y Tiwanacota, que son parte del patrimonio cultural.

EL DISCURSO INAUGURAL

Por lo anterior, dada su importancia se transcribe íntegramente el discurso inaugural de la Sra. Rosemarie Smith de Cederberg, del Museo Nacional Antropológico “Eduardo López Rivas” , en un acto público, con presencia de las autoridades, invitados especiales, población y vecindario, cuyo contenido permitirá comprender y conocer con certeza este gratificante hecho histórico ,donde expone las dificultades y el rol de las instituciones y personalidades que participaron en la remodelación total del museo, que es el reflejo el espíritu del orureño, un sueño que se hizo realidad, con trabajo mancomunado superando las vicisitudes que siempre se encuentran en obras de magnitud como en el caso presente.

El texto indica: “Tengo el alto honor de dirigirme a ustedes en un momento de enorme trascendencia para Oruro y lo hago con la satisfacción más íntima, llena de regocijo porque sé que estoy contribuyendo en una obra cuya proyección vivirá más allá del tiempo. Cuando se encontraba en funciones el presidente del H. Concejo Municipal, el Prof. Juan Molina, interesó a mi autoridad para que pudiera buscar la colaboración económica de la República Federal de Alemania, a fin de gozar de una subvención que permita la remodelación del Museo Nacional de Antropología que hoy lleva el nombre de un destacado profesional orureño Don Eduardo López Rivas. Hechas las consultas a mi embajada se me instruyó que presente el proyecto respectivo para que pudieran estudiarlo. El costo inicial era de dólares 80.000. En marzo de 1987, Bolivia tuvo la enorme satisfacción de recibir al Dr. Richar Von Weizsaker, presidente de la República Federal de Alemania, quien en su visita oficial, también, se acordó de Oruro y a tiempo de saludarle anunció la donación de 80.000 marcos que fueron entregados al señor Carlos Serrate, honorable Alcalde Municipal, de ese entonces, y que correspondía al 50 por ciento del costo total de la obra, cubriendo el otro 50 por ciento la H. Comuna. Como consecuencia de ello, fui honrada por las autoridades municipales con el cargo de presidente del Comité Pro ampliación de restauración del museo”.

“Debido al cambio de nuevas autoridades municipales fue el señor Jorge Barrientos, quien tuvo que agilizar los trámites respectivos para la ampliación y restauración del museo, habiéndose llamado a propuestas para la adjudicación de la obra y entregado al arquitecto Mancilla, desde ese momento muy lentamente y con las dificultades que siempre se presentan en una obra de magnitud, las mismas fueron ejecutándose. El comité se puso a estudiar los planos en reuniones semanales, escuchar los reclamos de las comerciantes que en aquel tiempo tenían sus puestos de venta en este lugar denominado mercado “Palenque”, y cooperar con ellas para que pudieran estar, ahora, ubicadas en un lote a 100 metros del museo y el cual tuvo el alto honor de inaugurarlo, junto al alcalde Jorge Barrientos. Así poco a poco el comité hizo todo lo posible para que dicha obra siga adelante y se realice de la mejor forma posible, razón que quizás en muchas oportunidades tuvimos serias dificultades y desinteligencias con la empresa ejecutora del proyecto, la misma que con criterio responsable, ha comprendido en determinado momento el papel que deberíamos cumplir como personeros legales de este hermoso museo que hoy tenemos la grata satisfacción de entregarlo para que nuestros niños y nietos sepan de dónde son y de dónde vienen, para apreciar más lo nuestro, para identificarnos con todo aquello que ha sido hombre altiplánico, ese regio componente del Tahuantinsuyo y celoso custodia de la pampa altiplánica que en desafío y búsqueda de su civilización, vive aún pendiente de todo lo que puede encontrar”.

“Sabemos que tenemos ya mucho material, pero aún obtendremos más porque esta tierra andina es riquísima y está llena de enormes yacimientos arqueológicos. Entiendo que esta obra será el orgullo de todos los residentes de la zona sud porque ellos la vieron nacer y caminar, constantemente les preguntaba sus opiniones y todos mostraron su plena complacencia por la forma como se ejecutaba la obra. De otro lado, debo confesar que pese a los constantes cambios de autoridades de distintas tiendas políticas, los trabajos marcharon normalmente, porque todos colaboraron con el comité y se dieron cuenta de la magnitud de esta obra y por ello mismo hacemos público nuestro agradecimiento a las autoridades de la H. Comuna, que fueron los coordinadores entre el Comité y la H. Comuna. Un agradecimiento muy especial a un dilecto amigo que nos acompañó en toda esta jornada difícil de trabajo, el Dr. Ramos Sologuren, asesor de este comité, que no escatimó esfuerzo para asistir siempre a todas las reuniones y darnos importantes sugerencias”.

“Cuando los trabajos del museo estaban concluidos o sea cuando se cancelaba la última cuota que correspondía a la República Federal de Alemania, mi deseo fue dejar el comité y dar por concluida mi intervención. Sin embargo, el H. Alcalde Municipal, Prof. Pedro Rubín de Celis, me solicitó para que continué cooperando como presidenta del comité a fin de impulsar las obras hasta este simpático momento”.

“Como buena orureña, querendona de mi tierra, no obstante saber que era todo un sacrificio, he aceptado, hemos planificado la segunda etapa del trabajo que debemos realizar cual es la implementación general del nuevo museo, construcción de muebles especiales que han sido diseñados por el Dr. Gonzalo Iñiguez de profesión museólogo y que ha sido contratado ex profesamente para que se haga cargo del montaje correspondiente y reglamentario, junto con el Arq. Rubén Urquiola, el Lic. Edwin Guzmán y, el señor Luis Guerra. El costo aproximado será de 5.000 dólares que dada la difícil situación que atraviesa la economía de la H. Comuna, nos veremos obligados una vez más a buscar esta colaboración en algunas instituciones o embajadas”.

“Razón porque aún nos toca recorrer un largo camino de sacrificios y constante trabajo, que estoy segura han de secundar las actuales autoridades municipales y las que pudieran llegar en lo futuro pues se trata de un proyecto que nos llevará largo tiempo y que tengo fe que ello culminará exitosamente, y esto lo digo porque he podido comprobar en la fecha al solicitar colaboración de varias instituciones y empresas comerciales e industriales de la localidad, solicitando la donación del poco mobiliario que actualmente podéis ver en este edificio y a quienes expreso mi gratitud ,tanto, a nombre del comité como de todo el pueblo, ya que de hoy en adelante este museo se convierte en la casa de los orureños. No puedo dejar de mencionar la valiosa cooperación que me ha prestado la Comunidad Europea en Oruro, mediante el programa del PAC, disponiendo la construcción de la casa de los Chipayas, haciendo un contrato con estos y trayendo desde ese rincón milenario verdaderas joyas patrimoniales, bajo el celo permanente del Prof. Luis Guerra Gutiérrez que prácticamente fue el tutor en el manejo administrativo, tanto la mano de obra como todo los materiales que han sido necesarios para su construcción”.

“También, deseo expresar mi agradecimiento a las autoridades de MACA para la construcción de un chullpar. Asimismo, reiterar mi agradecimiento al Comité Pro ampliación y restauración del museo en pleno, por las largas horas de reunión que con verdadero desprendimiento han estado junto a mi tratando de encontrar los mejores auspicios para que esta obra llegue a este momento de feliz culminación”.

“Doy gracias a la embajada de la República Federal de Alemania, y, a la H. Alcaldía de Oruro por haberme dado esta gran oportunidad de servir a Oruro que me vio nace y culminar con una obra que estoy segura será de aquí a corto tiempo un verdadero orgullo de los orureños”.

“Finalmente, si omitiera involuntariamente algún nombre de personas o instituciones que han cooperado con nosotros y no las menciono, ruego disculparme y estén felices porque de hoy en adelante este museo es patrimonio de todos los estantes y habitantes de Oruro, lo que nos compromete a seguir impulsando sus trabajos, su mejoramiento, y pronta implementación , y permanente cuidado”.

Fuente: Por. Dr. Antonio Revollo Fernández