Un simulacro desnudó falencias en la atención de pacientes de emergencia
28 mar 2012
Fuente: La Patria
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El simulacro de una explosión en la Empresa Metalúrgica de Vinto que dejó el saldo de 63 heridos, desnudó falencias en la atención de pacientes de emergencia en casos eventuales en el Hospital General “San Juan de Dios” y en el Hospital Obrero.
Dicha actividad estuvo organizada ayer por los personeros del Proyecto “Tiawanacu” que tiene a su cargo la Unidad de Quemaduras del Hospital General “San Juan de Dios”.
El simulacro se inició después de las 10:00 horas en la Empresa Metalúrgica de Vinto y tuvo la participación de conscriptos de la Segunda División de Ejército, personal de la mencionada empresa, efectivos policiales de las distintas unidades y personeros de salud de los dos nosocomios mencionados.
Fueron 63 los heridos que se registraron en la empresa tras las dos explosiones provocadas como parte del simulacro. Posteriormente, ambulancias de las unidades policiales y centros de salud se encargaron de trasladar a los heridos, principalmente al Hospital General “San Juan de Dios” y otro grupo al Hospital Obrero.
La población y gran parte del personal médico no sabía del simulacro, creyeron que se trataba de una situación real. Se vivieron momentos tensos en los nosocomios que desnudaron muchas falencias, a medida que las ambulancias y vehículos policiales dejaban a los heridos.
Algunas personas comenzaron a llorar al ver a los heridos que estaban vendados con gasas además de tener el rostro con signos de quemaduras. Cada paciente llevaba colgada en el cuello una tarjeta de identificación del grado de la quemadura, aspecto que no se pudo traducir rápidamente en la lectura del personal médico.
Faltaron camillas para trasladar a los heridos y no había el suficiente personal médico que ayude en las tareas de emergencia. En otros casos, se observó el traslado de los pacientes con los brazos cruzados por algunos miembros del hospital, que mostraban falta de sensibilidad y solidaridad para atender en esos casos de emergencia.
Tras casi una hora de tensión, se comunicó que la actividad fue parte de un simulacro y todo volvió a la normalidad.
EVALUACIÓN
El responsable del Proyecto Tiawanacu, Raúl Cáceres Amurrio dialogó con LA PATRIA después del simulacro para hacer una evaluación de lo sucedido.
“La Unidad de Quemaduras está hecha para hacer una campaña agresiva de prevención a nivel de las escuelas, especialmente para los niños y nos hemos dado cuenta que en el departamento de Oruro no tenemos un plan que se ejecute cuando ocurra un desastre de quemaduras y por esto hemos planeado hace un año con el gerente de Vinto (Ramiro Villavicencio), con la Segunda División, con el gobernador (Santos Tito), la Policía y ver qué pasaría”, explicó.
Argumentó que los responsables de esas instituciones aceptaron hacer el simulacro y ayer se llevó a cabo el plan. Añadió que solo sabían ciertas personas para que el ejercicio sea un éxito.
Dijo que los heridos fueron organizados de acuerdo al grado de quemadura.
LA PATRIA le consultó si Oruro está preparado para ese tipo de eventualidades, por lo que Cáceres dijo que “no”.
“Hay varias deficiencias por el número de ambulancias, número de camillas, el personal no coopera para hacer un esfuerzo de todo el hospital. Tenemos que concienciar a nivel de cada hospital y después formar un conjunto para que todos trabajemos al mismo tiempo cuando ocurra un desastre”, afirmó.
Por otro lado, llegó a la ciudad de Oruro un grupo de médicos y enfermeras especializados para el tratamiento de quemaduras desde Estados Unidos y participó también en el simulacro.
Fuente: La Patria
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