Resultados contundentes del Llece

El Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación (Llece), dependiente de la Organización de las Naciones Unidades para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) es una instancia para evaluar, intercambiar, probar, mejorar, innovar y hacer sinergia regional hacia la mejora de los aprendizajes. Asimismo, forma parte de la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (Orealc) con sede en Santiago de Chile, monitorea los avances en los aprendizajes de los estudiantes de la región. Actualmente está dedicado al Estudio Regional Comparativo y Explicativo (ERCE 2019).

Consecuentemente, el pasado 28 de julio el Llece y la Orealc, a través de un seminario web, dieron a conocer los resultados del análisis curricular del ERCE 2019, en la que se adhirieron; Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Cuba, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Paraguay, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay. La presentación de los resultados vía online, estuvo a cargo de Claudia Uribe, directora de la Orealc, en la que participaron investigadores educativos y las ministras de Educación de Colombia y Ecuador

Los resultados de análisis curricular – ERCE 2019 – de Bolivia, consideró el currículo del año 2014. En consecuencia, resultan ser sorprendentes y contradictorios de la realidad educativa que se tuvo desde la implementación del nuevo currículo base. La distribución de temas de lectura en matrices de análisis curriculares, comparados con la región de Latinoamérica, en la diversidad textual, en tercer y sexto grado tienen 75% y 86%, índice elevado con relación a los demás países, la comprensión lectora literal e inferencial de 8% y 10%, en las estrategias de lectura un categórico 0%, decodificación 0%, reflexión y evaluación 5% y 17%. La compresión lectora sigue siendo la gran debilidad durante la concreción curricular.

En lo concerniente a la distribución de temas de escritura en matrices de análisis curriculares en tercer y sexto grado, en el conocimiento sobre el código, se tiene 15% y 21%, procesos involucrados en la lectura 30% y 26%, diversidad textual 45% y 42%, morfosintaxis 10% y 11%, coherencia y cohesión un categórico 0%, dos aspectos textuales muy determinantes de la calidad de la escritura, están ausentes en el actual currículo base.

Referente a la distribución de temas de matemática en matrices de análisis curriculares, de tercer y sexto grado, en números y operaciones 53% y 39%, magnitudes y medidas 19% y 10%, geometría 25% y 43%, estadística y probabilidad 3%, patrones y algebra 0%, en los dos últimos indicadores, los demás países en Latinoamérica y el Caribe tienen avances significativos que desarrollan habilidades fundamentales en la resolución de problemas de diversa índole, considerada como una de las aptitudes cognitivas y no cognitivas transferibles de alto nivel.

Con respecto, a la distribución de temas de ciencias naturales en matrices de análisis curriculares, de sexto grado, en los contenidos relacionados al cuerpo humano y salud 39%, la Tierra y el universo 33%, ciencia, tecnología y sociedad 9%, seres vivos 9%, ecología y medioambiente 9%, la energía y sus manifestaciones 0%, además, la materia y sus manifestaciones 0%.

Por tanto, el Llece, sugiere fortalecer los contenidos asociados a Ciencia, Tecnología y Sociedad que conectan el desarrollo local con los desafíos globales, como la sostenibilidad y el pensamiento crítico, considerados parte de una educación de calidad. Asimismo, las habilidades de comprensión literal e inferencial, que, de acuerdo con la evidencia, serían las que permiten una comprensión lectora efectiva. Por otra parte, observa una disminuida presencia del conocimiento sobre el código en tercer grado y de la coherencia y cohesión, tanto en tercero como en sexto grado. En matemática, evoca resolver problemas que involucran la aplicación de operaciones en los ámbitos numéricos estudiados en cada nivel. Y por último, en ciencias naturales, recomienda fortalecer el currículo hacia un alineamiento de los contenidos con temáticas socio científicas y tecnológicas, que favorecen una aplicación crítica de los conceptos en la sociedad a partir de dilemas, debates y oportunidades que tensionen el rol de la tecnología en el bienestar de las personas.

La Agenda 2030 de las Naciones Unidas tiene dos estructuras: la educación para la ciudadanía mundial y la educación para el desarrollo sostenible, en el caso de la realidad educativa boliviana, según el Llece todavía se encuentran ausentes los contenidos asociados a la globalización y mundialización de los procesos sociales. Consecuentemente, una vez oficializada la clausura del año escolar 2020, el tiempo restante de la presente gestión, deberá servir para aplicar nuevas políticas educativas que respondan a los desafíos de la educación del siglo XXI, involucrando más a las autoridades educativas, maestros, estudiantes, padres de familia y ciudadanos comprometidos con la educación boliviana.

(*) Es Magister en Políticas de Formación Docente

Fuente: Por: Luis Alberto Callapino López (*)S