El Gobierno debe inyectar capital a las operaciones para honrar deudas

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“Es atribución y competencia del Gobierno central, el ‘fomento e inversión’, el de inyectar un capital de operaciones para honrar nuestras deudas, y trabajar con nuevos costos de tratamiento y maquila”, señaló ayer la dirigencia del Sindicato Mixto de Trabajadores Metalúrgicos ENAF, mediante un pronunciamiento.

Esa postura fue asumida en respuesta a las declaraciones realizadas por el presidente de la Corporación Minera de Bolivia (Comibol), Joaquín Andrade, quien indicó como solución al problema de deudas que atraviesa la Empresa Metalúrgica Vinto (EMV), debe inyectarse capital de 18 millones de dólares con algún inversor extranjero, por mes.

La EMV tiene deudas de más de 80 millones de dólares con las empresas mineras de Huanuni y Colquiri, según afirmó el titular de la Comibol. Pero para los trabajadores de Vinto, la deuda se aproxima a los 65 millones de dólares.

PRONUNCIAMIENTO

Indicaron que las deudas calificadas de “millonarias” con Huanuni y Colquiri, datan de gestiones pasadas, que no fueron honradas por la anterior administración.

AUDITORÍA

Asimismo, pidieron a la Máxima Autoridad Ejecutiva de la EMV que efectúe una auditoría externa, con el objetivo de conocer el origen de la deuda contraída con ambas empresas mineras.

Indicaron que tras la toma de la EMV la semana anterior, por los movilizados de ambas empresas, se desembolsó en total la suma de cuatro millones de dólares, dos millones para Huanuni y dos millones para Colquiri, como muestra de buena fe para llegar a una solución en los nuevos costos de tratamiento.

Se pidió al Ministerio de Minería como cabeza de sector y según sus competencias, el préstamo de un capital de operaciones y honrar las deudas, pero no se concretó nada, al ser un gobierno de transición.

“Cabe señalar y dejar de manera clara, que desde la nacionalización hasta la fecha la Empresa Metalúrgica Vinto, no recibió capital o inversiones por parte del Estado”, señalaron.

Finalmente, argumentaron que no se oponen a ningún tipo de inversión, siempre y cuando no represente hipotecar el

producto final a largo plazo.

Fuente: LA PATRIA