La solidaridad y la fe se hicieron presentes en la fiesta de Turco

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Los pasantes 2020 de la festividad de San Pedro y San Pablo de la localidad de Turco, Carlos Calle y Ruth Ignacio decidieron cumplir con la fiesta patronal de una forma distinta, apelando a la solidaridad y la colaboración con su población, por ello decidieron pagar el consumo de luz de todos los habitantes y realizar los arreglos correspondientes en la capilla.

En la población de Turco, entre el 28 y 30 de junio se celebra la festividad de San Pablo y San Pedro, cuyos pasantes para este año son Carlos Calle Mollo y Ruth Ignacio Reynaga, quienes al no poder cumplir con lo que se tenía planificado para la actividad festiva, decidieron hacer otro tipo de celebración, con un tinte más solidario y de servicio a la comunidad.

“Inicialmente la idea era llevar alimentos una cantidad similar al costo, pero hemos visto que eso iba provocar aglomeración, la dificultad de distribuir, el tema de transporte y otras condiciones, al final vimos por conveniente porque no el mes de junio que es la fiesta de San Pedro y San Pablo, cooperarles en la luz, es algo que llegará a todos los del pueblo”, señaló.

Dijo que se reunió con las autoridades originarias y de esa forma él junto a su esposa en calidad de pasantes de la festividad inicialmente dieron un monto de 10 mil bolivianos para pagar el consumo eléctrico de todos los pobladores, señaló que esto es un monto inicial ya que cuando se conozca el costo total se amortizará los recursos que falten.

Señaló que, junto a esta actividad, también se propusieron mejorar la iglesia que estaba deteriorada, actividad que se tenía planificada para principios de año, pero que no pudo cumplirse a causa de la cuarentena, felizmente días antes del 28 de junio se culminó con los arreglos.

“Son estas acciones que hemos hecho para que todos nos podamos alegrar en la fe de los señores San Pedro y San Pablo y por ende en nuestro Creador para que nos dé bendiciones para salir de esta pandemia que está azotando a nuestro país y eso fue lo que realizamos, esperamos que la gente también se proteja se cuide y nos cuidemos todos”, aseveró.

La actividad como tal pasó con un acto costumbrista y una misa de acción de gracias con una concurrencia muy reducida cumpliendo con las medidas de bioseguridad, para Carlos y su esposa el turno ya pasó porque al año siguiente se tiene a otras personas que recibirán las fiesta, pero él y su familia se sienten tranquilos y orgullosos ya que trataron de pasar la actividad festiva de otra forma, adecuándose a las circunstancias y colaborando con cada uno de los pobladores que a la vez fueron sus invitados de honor en esta fiesta tan particular.

Carlos espera que, con la fe de todo el pueblo, el mundo pueda sobresalir de este mal momento siempre cumpliendo con todas las medidas de bioseguridad.

Fuente: LA PATRIA