"El amor no se puede definir, porque definir es limitar y el amor no tiene límites" Carlos Cuauhtémoc Sánchez.
Podemos referirnos a él como un sentimiento sincero que no exige condiciones ni requisitos, es un proceso mental complejo, intrínseco que no se ha llegado a estudiar con profundidad y hasta la actualidad no se descifra todas las implicaciones que tiene en el comportamiento humano.
La pandemia pone a prueba todas las relaciones amorosas de las personas, y comprueba cuales son superficiales y cuáles no. Las superficiales se desmoronan a falta de contacto o acercamiento físico porque están acondicionadas. Las relaciones amorosas que perduran, son maduras porque tienen un grado de respeto suficiente que pone por delante la lealtad, y la confianza.
Toda nuestra vida está construida a base de experiencias de interacción social, los encuentros nos han permitido afianzar nuestros gustos y rechazar nuestros disgustos. Tener una pareja significa darle de tu tiempo, compartir tus metas y construir proyectos juntos. A las personas les gusta tener nuevas experiencias y repetir los momentos confortantes a lado de la persona querida.
El actual contexto nos ha obligado a pasar de ser activos a inactivos, de salir todos los días a quedarnos en casa, de forma abrupta nuestro cotidiano vivir se ha visto influenciado, es un cambio importante porque puede repercutir de forma muy negativa.
La OMS señala que es vital entender que distanciamiento físico, no es lo mismo que distanciamiento social. Las personas por naturaleza somos seres enteramente sociales, no podemos vivir al margen de los demás y para cumplir con las medidas restrictivas, el confinamiento debe permitirnos relacionarnos con nuestros seres queridos de forma placentera.
La distancia no debe ser una excusa para no demostrar el interés por alguien, en la actualidad contamos con un sinfín de herramientas tecnológicas que bien utilizadas nos acercan a los demás y nos permiten demostrar nuestro amor. Los mensajes, las llamadas, videollamadas, videos, etc., acortan las distancias sentimentalmente.
El confinamiento ha demostrado que no priva a las personas que dar o recibir amor, de forma contraria la mayoría de personas comprendemos lo importante que es aprovechar los buenos momentos a lado de nuestra pareja.
En los aniversarios, las parejas han adoptado estrategias creativas, como por ejemplo de instalar una cena virtual con una copa de vino y una vela que le de un ambiente de romanticismo. Otras personas a través de aplicaciones de edición preparan videos conmemorativos de todos sus mejores momentos. Cuando existe amor el confinamiento no se convierte en una barrera para demostrarlo, puede significar una oportunidad de oro para insertar valores imprescindibles en la relación.
El distanciamiento, por lo tanto, puede mejorar si se decide, las relaciones amorosas o de forma contraria complicarlas. Las parejas tienen en sus manos impedir que las medidas restrictivas afecten su relación amorosa.
La crisis sanitaria actual, activa el sentimiento de condescendencia entre las personas, mensajes de "cuídate" "no salgas de casa" "evita el contacto con las personas" develan el interés de esa persona en verte bien de salud por el amor que te tiene.
Darse una escapada y salir en cuarentena para ver a tu pareja es una muestra de amor, porque no miras los riesgos, pero si el beneficio, sin embargo, tu pareja deberá evitar ponerte en riesgo y te dirá que es mejor ser prudentes y no arriesgarse.
La convivencia con nuestros familiares debe ser positiva, muchas familias han adoptado técnicas para tener una relación entretenida a través de juegos de mesa, y en el caso de las personas que no estén cerca de nosotros existen bastantes aplicaciones para jugar de manera virtual, ludo, uno, damas, ajedrez, etc.
¿Qué tan cerca podemos estar de los demás para demostrar nuestro amor?
Es un desafío mantener las relaciones amorosas, pero no es imposible. La actual situación permite reflexionar a todas las personas sobre lo importante que son nuestros seres queridos para nosotros y el tiempo que les damos para compartir momentos de dicha y felicidad.
No sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos, y entre tantas negativas actuales siempre debemos buscar ese haz de luz en el fondo de la oscuridad que nos señale el camino para restablecer nuestro diario vivir lo mas antes. Todos los esfuerzos que se realizan para sobrellevar esta pandemia se hacen bajo el sentimiento de amor a uno mismo y a los demás.
(*) Es Universitario. Secretario General y Socio Titular de la Sociedad Científica de Estudiantes de Derecho de la Universidad Técnica de Oruro. Miembro del Comité Editorial del libro "Historial de la U.E. Jorge Oblitas". Ex Ejecutivo de la Federación de Estudiantes de Secundaria de Oruro F.E.S.-O.
Fuente: Por: Iván Andrés Agreda Cuaquira (*)
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