Mientras tanto es imperioso que la colectividad nacional y la de Oruro en particular,
acomoden ciertas necesidades y obligaciones a la extensión de la cuarentena, tomando en cuenta además que se han aprobado algunos bonos extraordinarios "no políticos" que serán entregados justamente a los más damnificados
Por el lapso de una quincena más ha sido prolongada la cuarentena que rige en el país, como medida de previsión frente a la llegada del coronavirus, una enfermedad que apareció en la China y se expandió en menos de 90 días, propiamente en todo el hemisferio, causando centenares de víctimas fatales y miles de contagiados en varios países, incluyendo aquellos del imperio norteamericano, muchos en el continente europeo, alto porcentaje en naciones del sector asiático y transponiendo océanos, también el virus se posesiona en países de centro y Sudamérica, en éste último sector, nuestro país que está soportando la llegada del mal, en buena cantidad transportado por nacionales o visitantes provenientes del exterior.
Por la cantidad de afectados con los efectos del coronavirus (Covid-19), los organismos internacionales que tienen que ver con la aparición y propagación de ciertas enfermedades, califican la situación presente como una pandemia, pues su extensión y número de afectados, compromete a casi todo el hemisferio y son miles los "contagiados" y con cifras preocupantes los fallecidos.
Las autoridades del Gobierno de Transición, tomando con seriedad el tratamiento del caso, aplicaron medidas de control, aislamiento social y cuidado higiénico, entre otras medidas, mediante el dictamen de una cuarentena nacional, medida que en algunos casos, ejemplo el de Oruro, que fue el primer departamento nacional que aplicó severas medidas de prevención, la medida de restricciones, debió culminar este 15 de abril. Sin embargo y como es de conocimiento público, también en Oruro se detectaron nuevos casos, lo que obliga a tomar recaudos necesarios, como en todo el país para enfrentar al Covid-19 y cortar su propagación, aplicando rígidamente la ampliación de la cuarentena por una quincena más, propiamente hasta fines de abril.
Es evidente que había la esperanza de que algunas medidas fueran levantadas o en su caso flexibilizadas, pero las cifras sobre el aumento de casos del coronavirus, en varios distritos, obligó a una comisión profesional y al gabinete ministerial, sopesar la situación y evaluando los hechos, tomar la medida más adecuada cuidando la salud ciudadana en nuestro país.
Lamentablemente hay voces contradictorias y alarmistas que pretenden crear desconcierto ciudadano, promoviendo una serie de actitudes contrarias a la voluntad de la población que serenamente observa la realidad y no sólo admite las medidas, sino que exige mayor rigidez en su aplicación, precisamente para enfrentar la pandemia y además, a "resabios del gobierno huidizo", que de manera irresponsable, busca enfrentamiento entre bolivianos y un conflicto de orden político que ya no admitirá la mayoría de bolivianos.
Bajo esas alternativas, se ha exhortado a la población a cumplir con las reglas de la cuarentena, existiendo en el equipo superior de Gobierno el compromiso de realizar un trabajo minucioso de análisis de los casos particulares de sectores que confrontan con mayor dureza los efectos de la medida vigente. Esa posibilidad de favorecer a los más necesitados y afectados se podrá conocer en el curso de la presente semana.
Mientras tanto es imperioso que la colectividad nacional y la de Oruro en particular, acomoden ciertas necesidades y obligaciones a la extensión de la cuarentena, tomando en cuenta además que se han aprobado algunos bonos extraordinarios "no políticos" que serán entregados justamente a los más damnificados.
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