Buscan recuperar “confianza mutua” entre nuestro país y los EE.UU.
21 mar 2012
Fuente: La Patria
Se presenta como muy complejo el problema de soluciones diplomáticas entre nuestro país y los EE.UU., cuando surgen algunas trabas que se originan en malos entendidos que obligan a expresiones amenazantes que pueden alterar todo un proceso que se rearma después de haber transcurrido un tiempo largo, con perjuicios que afectan más a nuestra economía que a la otra que se mantiene intacta, con relación a los muchos países de nuestro continente.
En el fondo de este asunto lo que se reclama es que el país del Norte no valore en su justa dimensión los esfuerzos que realiza el nuestro en la lucha contra el narcotráfico y la erradicación de la coca excedentaria. Un reciente informe antidroga del Departamento de Estado de Estados Unidos aplaza la política antidroga del Gobierno boliviano y muestra algunas contradicciones cuando por otra parte -aunque mínima- valora ciertas tareas que se realizan en Bolivia en contra del narcotráfico.
Ese hecho de manejar informes que no satisfacen a las expectativas de Bolivia en una tarea conjunta que va más allá no sólo de las buenas intenciones, provocó una reacción del Mandatario cuando advirtió que podía cerrar la embajada de EE.UU., si ese país seguía “molestando”. El hecho es entendido por otras autoridades nacionales como el Ministro de Gobierno y Canciller a.i. del país, cuando refiere que la advertencia es una manifestación de protesta, frente a los esfuerzos que se hacen por superar los problemas del pasado.
Cómo se ha recibido la expresión de protesta en el otro lado, es algo que en el fondo no conocemos, pero que diplomáticamente ha sido manejado con “pinzas” para no entorpecer el avance de un proceso de “reconciliación” que todavía demorará algún tiempo más en restablecerse para llegar a la designación de embajadores que reabran los vínculos entre los dos países.
Manejando el tema en el bajo fondo, por lo menos en lo que corresponde a nuestra cancillería, el segundo titular de esa cartera afirmó que “Bolivia y Estados Unidos trabajan en la reposición de embajadores y la construcción de una relación de confianza mutua”.
Cómo entender el hecho, después de la última amenaza, es un asunto que se ventila en el nivel “de Estado” y en el que las determinaciones corresponden a los estrategas de la diplomacia internacional.
Lo que se espera es el reconocimiento de las gestiones avanzadas hasta el presente, como la firma entre los representantes de La Paz y Washington el mes de noviembre del año pasado de un convenio marco que sentó las bases de una nueva relación bilateral, refrendada por otro acuerdo de cooperación que fue suscrito el mes pasado en el contexto de las nuevas reglas de un fluido relacionamiento que ya se traduce en un apoyo económico del país del Norte en planes de salud que desarrollará el nuestro.
En opinión de legisladores de la oposición, de expertos en temas diplomáticos, y de los observadores en asuntos externos este proceso de idas y venidas en el avance de negociaciones merece ser llevado con responsabilidad y acudiendo en todo caso a las mismas instancias diplomáticas para expresar reclamos y dudas sobre el curso del proceso de “sana, sana” que en los últimos días obligó a la cancillería “poner los paños fríos”, para bajar la temperatura en una etapa muy delicada. Lo importante será recuperar la confianza mutua sin incurrir en nuevos arrebatos de soberbia.
Fuente: La Patria
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.