Jorge Vargas continúa rescatando históricas máscaras del Carnaval

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Uno de los investigadores que logró aportar bastante al Carnaval de Oruro, Obra Maestra del Patrimonio Oral e Intangible de la Humanidad, con su trabajo, es Jorge Vargas Luza, quien sorprendió ayer por la mañana, exponiendo por primera vez, nuevos descubrimientos de máscaras que son parte de la historia de esta celebración.

La nueva colección consta de seis máscaras, entre las que se encuentran dos piezas de cuero, que según supone Vargas, pueden tener una data de antigüedad anterior a la época de la Colonia, con la que fundamenta sus investigaciones anteriores.

Por otro lado, cuatro máscaras sólidas están elaboradas de una manera que el mismo investigador no puede identificar, consiguiéndolas de las mismas familias que las poseían, teniendo que viajar a diferentes lugares del departamento para obtenerlas.

Con emoción cuenta cómo consiguió cada una de las piezas, por referencia de familiares del ya fallecido Freddy Aguilar, la familia Aguilar y una conocida de su barrio, María Aldunate, en Huayñapasto Grande, el cerro La Colorada, el mismo cerro de San Pedro, donde no pensaba encontrar estos verdaderos tesoros.

Con referencia a las máscaras de cuero, aseguró que se tiene la certeza que son de la época antes de la Colonia, por lo que son piezas invaluables para él.

"La danza de la diablada en Oruro tiene data de antes de la Colonia, las primeras máscaras que a los que los españoles satanizaron, no eran máscaras con cuernos, ni con ojos saltones, sino, en las danzas originarias que había como las chojkillas, la danza del llamallama, del sikuri, utilizaban máscaras pero en cuero de animal, que es completamente y tiene una forma humana", enfatizó Vargas.

Las piezas se encuentran bastante deterioradas, pero esto no quita la belleza de su aporte histórico, aunque no encuentra el apoyo de las autoridades para poder restaurarlas, por lo que se encuentra en busca de un lugar de exposición de toda su colección, para que no se sigan deteriorando guardadas en su almacén.

Fuente: LA PATRIA