Varios factores alteran venta de materia prima

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Aunque se menciona que el asunto está resuelto en los altos niveles de los países más ricos del mundo, China y Estados Unidos de Norteamérica, se mantiene latente un factor de competencia que es parte de la "guerra silenciosa" por las condiciones comerciales de esas potencias que no pueden nivelarse y por lo mismo las diferencias reinantes, mantienen un "estado de beligerancia" que altera los precios internacionales para el comercio de las principales materias primas que producen los países exportadores, entre los que se cuenta el nuestro.

Esa situación aún vigente ha ocasionado una desaceleración del comercio en la comunidad mundial, lo que se traduce en una baja del precio de las materias primas, complicando la economía de los países productores que están obligados a replantear sus programas financieros dependientes exclusivamente de la extracción y exportación de hidrocarburos (gas) y minerales.

Esa situación necesariamente tiene que ver con la contracción productiva en nuestro país, pues se reducen los volúmenes de rendimiento, toda vez que los precios internacionales también marcan vaivenes descendientes que obligarán a recortar el presupuesto nacional y "achicar" la distribución de recursos en las cuentas de gobernaciones y municipios y también en la universidad pública.

Si bien en nuestro país el problema económico ya tenía un registro de bajada desde hace cuatro a cinco años atrás, situación denunciada por profesionales de la materia pero hábilmente disimulada por las exautoridades financieras que se ocupaban de mostrar el liderazgo que ocupaba nuestro país en materia de crecimiento (PIB) y que no refleja el estado real de la economía nacional, pero sirve para crear expectativas irreales de una economía ficticia, como lo revelan los expertos de la materia.

China entre otros es importante comprador de minerales bolivianos, en tanto que Brasil y Argentina son compradores de gas natural, en los dos casos se trata de mercados que ingresaron en una etapa complicada de su situación económica, lo que se refleja en una menor demanda de materias primas, el gas y los minerales para el caso boliviano.

Una observación de expertos señala que debido a las circunstancias reinantes en los países importadores, en el nuestro habrá que adoptar situaciones de emergencia, si se agudiza la baja de precios, especialmente en el caso del estaño con problemas hace tiempo, ahora será el zinc y el plomo que también estarán, ojala sea por poco tiempo, en la lista de minerales baratos. Estos hechos reales en nuestra situación económica deben servir para reponer el funcionamiento del Banco Minero de Bolivia, como organismo que en su tiempo solía aportar a la minería en periodos críticos de sostenimiento.

Fuente: Portal Minero