La presencia de recursos naturales no renovables tiene importancia especial en algunas zonas del
altiplano orureño, la riqueza minera deberá ser explorada seriamente y hay expertos que sugieren una tarea paralela en busca de gas o petróleo. Puede significar una alternativa para el desarrollo de la región
En el día del aniversario de la Revolución del 10 de Febrero, la Presidente del país, entregó e inauguró un moderno edificio de propiedad de Y.P.F.B. que en el futuro servirá para la atención de los usuarios y el control estricto del servicio de abastecimiento de hidrocarburos a la ciudad de Oruro y sus provincias.
Una moderna estructura que le da un toque especial a la zona norte de la ciudad donde todavía avanza lentamente la construcción de edificios de varios pisos que si bien son una muestra de crecimiento vertical, no siempre son parte de superficies en las que se cuida el medio ambiente, aire y sol, pero en el caso del edificio petrolero de Oruro, se trata de una planta de nueve niveles, ocupa una superficie de terreno de 1.767 metros cuadrados y tiene una capacidad de albergar a más de 300 personas y su costo fue de 26,8 millones de bolivianos, con recursos propios de la institución, está habilitado en todas sus dependencias.
En realidad mencionamos este hecho porque en mucho tiempo no se había realizado una obra de esa magnitud tratándose de servicios a la comunidad, por lo mismo el esfuerzo y decisión de la petrolera orureña, es digna de mención por su contribución al urbanismo citadino y por las condiciones de ofrecer mejores servicios a una población que diariamente y desde diversos sectores, como el transporte, el gas domiciliario, el GLP y estaciones de servicio permiten "dar movimiento a la ciudad", pues está claro que sin los combustibles, no habría desarrollo.
Con la entrega del edificio que estuvo a cargo de la Presidente Áñez, se reiteraron compromisos de mayores mejoras en los servicios ampliando las redes de gas a domicilio y restableciendo un sistema de comercialización del producto en garrafas, especialmente con mayores cantidades del combustible para cubrir la demanda del área rural. La construcción del moderno edificio con recursos propios de la unidad petrolera departamental, es una prueba de la importancia que reconoce la administración central con Oruro, un centro desde el que se mueve el suministro y control de adecuado abastecimiento de combustibles.
En Oruro aún está viva la esperanza de que se encuentren depósitos de petróleo o gas, considerando que por lo menos uno de los intentos de exploración en la zona altiplánica mostró alentadores indicios de la presencia del oro negro, se hizo una perforación de prueba y los resultados quedaron en secreto, pero el pozo fue cerrado, aunque los vecinos del lugar señalan fehacientemente que se proveen de combustible para sus lámparas hogareñas del petróleo que fluye en el contorno del pozo inhabilitado.
La presencia de recursos naturales no renovables tiene importancia especial en algunas zonas del altiplano orureño, la riqueza minera deberá ser explorada seriamente y hay expertos que sugieren una tarea paralela en busca de gas o petróleo. Puede significar una alternativa para el desarrollo de la región.
La construcción del moderno edificio de YPFB en Oruro, es necesariamente un incentivo para trabajar en la búsqueda del gas.
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