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Lunes 10 de febrero de 2020

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10 de Febrero de 1781, el germen de la lucha contra el yugo europeo

10 feb 2020

Fuente: LA PATRIA

Mientras algunos historiadores aseguran que aquel 10 de febrero de 1781 ya se empezaron a dar consignas de libertad e independencia; otros consideran que se trató más de una revuelta con tintes políticos de la época. Lo cierto es que más allá de estas dos visiones, aquella histórica fecha los orureños expresaron su desacuerdo con el dominio español, lo que más tarde llevó a forjar una idea de rebelión y convertirse en una nación soberana.

Para comprender mejor lo que ocurrió aquel sábado 10 de febrero de 1781, se debe tomar en cuenta muchos antecedentes en el ámbito político y económico, algunos de ellos se remontan hasta 40 años antes del incidente.

Sin embargo algunas más directas ocurrieron días antes, en enero del mismo año, cuando se suscitó un conflicto en Challapata. El corregidor de Paria, Bodega, salió de sus tropas rumbo a esa población y arrestó a tres líderes indígenas, Santos Mamani, Lope Chungara y Carlos Canaviri, por haberse opuesto al reparto de tributos, diezmos, mitas y otro tipo de exigencias económicas.

Esto derivó en que un masivo grupo de indígenas rodearan la población exigiendo la liberación de sus líderes. Al no existir respuesta, finalmente mataron al corregidor Bodega, degollándolo en el centro de la plaza, a pesar del intento del Cura Beltrán de ayudarlo y conseguir piedad de los rebeldes.

Esta acción y otras que se suscitaron posteriormente en poblaciones aledañas y con anterioridad en el territorio del Perú, generaron temor en los habitantes mestizos, criollos y españoles de Oruro.

Por ello, cuando la información de una supuesta reunión de indígenas llegó a oídos de los pobladores, el corregidor Ramón de Urrutia, que poco antes asumió el cargo en una elección que generó descontento en los mestizos y criollos; ordenó el acuartelamiento de cuatro compañías en el cuartel de la Villa; una de españoles, otra de criollos, una de mestizos y la última de negros.

El viernes 9 de febrero se ordenó el acuartelamiento, pero existía la susceptibilidad de que entre estas compañías existiese un enfrentamiento o, en el caso de los mestizos, traicionaran a los otros y se unan a los indígenas.

Esto generó que Urrutia ordene encerrar con llave a las compañías de mestizos y criollos, durante la noche.

Los reclamos no se hicieron esperar y aunque las compañías encerradas pudieron salir en la mañana del 10 de febrero, la molestia continuaba. Se negaban a volver a acuartelarse por si nuevamente ocurría lo mismo.

En medio de este ambiente, se oyeron cornetas en los alrededores, lo que hizo creer que se trataba de los indígenas, formaron las compañías, que aún guardaban cierta susceptibilidad, pero finalmente los españoles abandonaron y fueron a refugiarse a una vivienda que hizo de fuerte para ellos.

Uno de ellos, antes de refugiarse encendió la chispa de la violencia. Disparó hacia la colina donde se oyeron las cornetas, pero no se trataba de los indígenas, sino de mujeres de los criollos y mestizos acuartelados.

El disparo provocó la respuesta de los hombres que se lanzaron contra los europeos y se inició la matanza y el saqueo de viviendas; en esta acción participaron personajes como Jacinto Rodríguez y su hermano Juan de Dios Rodríguez, asimismo Sebastián Pagador.

Tras la matanza, el corregidor Urrutia logró escapar. Jacinto Rodríguez fue proclamado entonces en ese cargo al día siguiente.

Días después los indígenas ingresaron a la Villa en un acuerdo con los mestizos, pero luego asumieron otra actitud y en vez de saquear y perseguir a los europeos, comenzaron a tomar represalias contra los criollos también. En este ínterin, en un hecho que no es del todo claro, tomaron a Sebastián Pagador, quien en su intención de defender las Cajas Reales, hirió a un indígena y generó la furia de este grupo.

Supuestamente debían llevarlo ante Jacinto Rodríguez para ser sancionado, pero murió antes de ello, a manos de los indígenas.

Si bien en el levantamiento aún no se habló de independencia, si se comenzó a cuestionar el gobierno europeo, que días después retornó y se castigó a todos los partícipes de la sublevación.

BIBLIOGRAFÍA

Bicentenario 200 Años de Libertad - Memoria I

Fuente: LA PATRIA
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