Nuestro país, geográficamente diverso y hermoso, cuenta con un altiplano frígido, valle templado, llano, Amazonía, cálido, con clima variado, se tiene producción agrícola, ganadera variable, cada región con su música, danza nativa distinta, tiene su propio carnaval, idioma originario, gastronomía; diferentes nacionalidades, con valores de vida comunitaria, solidaridad, reciprocidad; esta diversidad cultural, es una gran riqueza para el desarrollo turístico, que aprecian propios y extraños, corresponde al Estado, fortalecer esta realidad social.
Estas manifestaciones culturales, están siendo amenazados por la influencia extranjera, en restringir, excluir, la creatividad, originalidad, de los pueblos indígenas, étnicos, que se encuentran atemorizados, piensan que con las nuevas autoridades se pueda perder, todos sus derechos colectivos e individuales, que habitan nuestra región, temor a ser canceladas sus conquistas, logradas con años de lucha sacrificada y respaldada por la CPE.
Hasta ahora, los gobiernos que pasaron por el palacio quemado, han tenido políticas de corto alcance, haciendo reformas, para cinco años, por los intereses de una minoría, sin mirar a toda la población en general, con presupuestos elevados; afectando la economía de la gente humilde; después viene otro gobierno para desconocer, rechazar, las cosas positivas; mucha gente entra al poder político, para hacer cambios de forma transitoria, que no favorece al pueblo, provocando, inestabilidad económica y política, mayor desempleo, proyectos a medio concluir; las nuevas autoridades van cambiando a los funcionarios públicos, por su gente de confianza, despedir a los trabajadores asegurados, de las empresas públicas, contratando a otros desocupados, es la idiosincrasia de los partidos políticos y que no gusta a la gente.
Antes atemorizados la clase media, profesionales, gente desocupada, ahora con las nuevas autoridades transitorias, se percibe miedo, temor, de parte de los pueblos indígenas, originarios, campesinos, las mujeres de pollera, piensan que las nuevas autoridades gubernamentales, les van a despojar de sus derechos, como ciudadanos, piensan que van a ser maltratados, humillados, perseguidos por sus acciones políticas. Se les perseguía a los que no pensaban igual que ellos, hoy también, están siendo perseguidos, a los que no tienen el mismo credo partidario; las autoridades gubernamentales, deben respetar la autonomía institucional, de los órganos de poder y con relación a los delitos comunes, se debe hacer cargo la justicia ordinaria.
Los partidos políticos, quieren restringir, los derechos de las etnias, continuando con acciones occidentales, valores extranjeros, homogeneidad de pensamiento, opinión, hacen discursos en forma arbitraria, a nombre de la gente; los líderes políticos, respetan la libertad, de su militancia, simpatizantes y los ciudadanos que no pertenecen a ningún partido, están condenados al sometimiento, imposición, no se les permite escuchar sus problemas, intereses y utilizan, a los campesinos para fines egoístas.
Entre los líderes políticos están en pelea, unos por volver al concepto de República, en cambio otros quieren, continuar con el denominativo de Estado Plurinacional, contradicción en el lenguaje español, en la concepción de los indígenas no se tiene problemas, existe bastante comunicación entre los pueblos originarios; a los líderes, gobernantes, les queda hacer normativas, para convivir entre distintas nacionalidades, grupos étnicos, trabajadores obreros, clase media, con diferentes formas de pensar, la realidad nos dice que no se puede excluir a nadie, todos los bolivianos son importantes en nuestro país.
Los partidos políticos, tendrían opción de ganar las elecciones, siempre y cuando, valoren, incorporen como candidatos a diputados, senadores, a los pueblos indígenas, campesinos, originarios, es fuerte el caudal de votación, respetar su cultura, lengua, costumbres, su identidad cultural, es sinónimo de mantener la democracia.
No sólo el folclore, la música autóctona, es considerado como expresión cultural de los pueblos originarios, también sus tradiciones, costumbres, gastronomía, espiritualidad, conocimiento de la realidad económica y social. En los carnavales, se observa, en muchas regiones del país, las distintas manifestaciones folclóricas, con sus características propias, únicas, originales, corresponde a las autoridades gubernamentales, respetar, potenciar estas expresiones sociales, el turismo y crear material, literatura para difundir al mundo nuestra riqueza cultural.
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