El valor de la lealtad infinita

El valor a la vida de la naturaleza y todos los seres que habitamos en ella, ha sido parte inicial de reflexión en mi persona sobre el tiempo en que vivimos; tenemos una agenda repleta de trabajo, no tenemos tiempo para ver lo que pasa a nuestro alrededor, no conocemos a los vecinos y a veces sin tiempo para atender a nuestras propias familias. Este presente siglo, trajo consigo una enfermedad mortal llamada "estrés", que es el fruto de la tensión laboral, y en medio de ella, otras enfermedades colaterales como la diabetes y problemas cardiacos.

Para escribir este artículo, me ha sido fuente de inspiración la película "Siempre a tu lado: Hachiko, el perro leal"; una producción cinematográfica de STAGE 6 - Inferno, producida el año 2008 y protagonizada por reconocido actor Richard Gere como el Profesor Parker. La narrativa del guión muestra a la Estación de Trenes en Bedrige donde el Prof. Parker recoge a un pequeño cachorro extraviado en la plataforma de la estación del tren en el año 1923. Era un perro de la clase Akita Today entre los japoneses, una clase canina especial con larga data de tradición entre la realeza nipona. Durante 3 años Hachi lo acompañaba en las mañanas hasta la estación y esperaba al Prof. Parker de regreso del trabajo en la plaza de la estación del tren de Bedrige, siempre a la misma hora, por lo que todos los trabajadores de la estación, los pasajeros y demás comerciantes del entorno lo conocían. Era parte de la familia y compañero fiel del Prof. Parker. Pero un día infortunado de 1925, el profesor sufre un infarto en su trabajo y fallece, por lo que ya no regreso vivo a la estación donde Hachi lo esperaba puntualmente todas las tardes. Tras la muerte del Prof. Parker, Hachi iba todas las tardes a la estación del tren esperando el regreso del profesor, eso ocurrió durante 9 años, hasta que en marzo de 1934 Hachi fallece en la jardinera de la plaza de la Estación del tren Bedrige, donde todas las tardes solía esperarlo. Durante ese tiempo, Hachi había sido ya afamado porque un periódico de la capital había hecho una nota extensa de la historia de Hachi fotografiándolo cuando aún estaba vivo. En Shibuya railroad Station, le hicieron una estatua de bronce en su memoria; una forma de recordar a todos los viajeros, el valor de la lealtad infinita a un ser amado y nunca olvidarlo en el tiempo.

Ahora bien, a que quiero llegar con esta historia canina y de lo que expuse en los primeros párrafos de este escrito; pues decirles que, el fenómeno económico absorbente del mundo capital globalizado, ha hecho que se pierda ese tipo de valores de lealtad infinita entre las personas, tanto a nivel familiar, de grupo y peor aún a nivel institucional empresarial, en donde las relaciones laborales entre empleados y sus ejecutivos se han vuelto asimétricas, cambiantes y llenas de incertidumbre entre los trabajadores creándose una suerte de crisis laboral al interior de la empresa. La desconfianza y la lealtad institucional del trabajador están medidas en función al valor económico. Las instituciones y empresas privadas son las que más sufren estos avatares del siglo XXI, donde sus personales de planta y servicio son casi constantemente removidas o cambiadas, dado que los mismos empleados deciden abandonar la institución debido a la oferta y la demanda; cada empresa las contrata según a su política económica. En otras instituciones, se ha visto casos críticos donde personal de mayor confianza hicieron perder la base de datos fundamentales, o filtrando información confidencial a otras empresas de la competencia. En todos los casos registrados, el valor económico es el que determinó para que dicha persona actúe de esa manera, ocasionando graves problemas inmediatos al interior de la institución. Esta clase de actitudes anómalas y nada leales con la institución, en su generalidad se han sancionado con amonestaciones de llamadas de atención, memorándum, descuentos salariales o despidos definitivos. El valor de la lealtad hacia una persona allegada, en el trabajo y con la institución se ha visto medida al valor económico. En el caso de los políticos en la coyuntura de la política actual de Bolivia, las pugnas del poder en la administración de los cargos públicos, se ha visto las pugnas de distribución económica. La historia pasada de Hachi debería hacernos reflexionar.