Hay que enfrentar riesgos para mejorar la economía nacional

Tras el tiempo transcurrido y en la última quincena del último mes del año, se hace necesario rescatar algunos detalles considerados importantes en el sector empresarial, para enfrentar algunos riesgos, producto de las condiciones económicas vigentes en países de la vecindad y que alteran nuestro sistema financiero que se mantiene inalterable, por ejemplo en el cambio monetario y la paridad con el dólar, una muestra de la desigualdad en la competencia comercial que rige para las operaciones de importaciones y exportaciones de variados productos, pero además con un sistema ilegal de comercio fronterizo en el que predomina el contrabando.

Entidades empresariales han mostrado preocupación en el tema y con algunas coincidencias generales y varias alternativas posibles, desde los diferentes sectores productivos, sugieren desafíos especiales para dinamizar la economía nacional, tomando en cuenta las variables que se confrontan en materia del crecimiento nacional y que en algunos casos deben ser motivo de incentivos especiales para alcanzar un equilibrio regional, en función a las riquezas de cada distrito, sus posibilidades económicas y las opciones para impulsar proyectos en los que puedan disponerse de riquezas naturales, con sentido empresarial y que aseguren la viabilidad de un proyecto de trascendencia para la sostenibilidad del desarrollo nacional.

Es indudable que nuestro prodigioso país posee innumerables riquezas, incluyendo las no renovables y que paradójicamente son las que desde algunos años nos permiten "costear" los gastos necesarios del sostenimiento económico del país, e inclusive como se observó y se criticó, gastar millonarios presupuestos en proyectos suntuarios que se convierten en pruebas del derroche de nuestros esmirriados presupuestos nacionales.

En lo que corresponde a la Cámara Nacional de Comercio (CNC), la institución tiene tres desafíos para el actual Gobierno y el que se instalará más adelante, pues se trata de una actividad de mediano plazo para equilibrar el crecimiento regional, redistribuir el gasto fiscal, manteniendo la estabilidad económica y finalmente promoviendo ciertas actividades de complemento por ejemplo a la industria del turismo y la artesanía, que en determinados distritos han mostrado cierta importancia en temporadas de intenso flujo de visitantes.

La CNC prevé que la economía nacional cerraría la gestión con un crecimiento no mayor el 3,1% y una balanza comercial negativa bordeando 900 millones de $us., además menores reservas internacionales que estarán en 6.700 millones de dólares, cifra crítica frente a la perspectiva que existía unos tres años atrás, además de una impresionante deuda externa con relación al PIB Nacional, lo que se considera extremadamente negativo.

Por su parte en la Cámara Nacional de Industrias (CNI), su ejecutivo señala que hay que enfrentar la situación planteando soluciones prácticas que puedan recuperar la confianza ciudadana en el sistema productivo nacional, superando los graves problemas que causaron las convulsiones sociales. El presidente del sector propone directamente al Gobierno actual, "la aprobación de una Ley de Inversiones, garantizada paralelamente por una Ley de Incentivos Fiscales".

Las propuestas del sector empresarial merecen atención especial, pues se trata de actitudes y medidas que aseguren un moderado pero seguro crecimiento, fomentando la búsqueda de alternativas productivas y el fomento de rubros importantes como la industrialización de la minería, un rubro que merece inversión especial para mostrar su "reservado" potencial. Se trata de un desafío especial, de riesgo, inversión y tiempo.