La ejecución presupuestaria de los municipios empeora
13 mar 2012
Fuente: La Patria
El año 2011, el resultado de ejecución presupuestaria en los municipios deja dudas sobre la efectividad del sistema que se utiliza para gastar los recursos públicos en planes de desarrollo comunitario. El año pasado fue peor que el anterior, pues las cifras así lo demuestran cuando entonces se alcanzó un promedio de más del 65 por ciento y los presupuestos últimos apenas llegaron al 50,4 por ciento.
Esa diferencia existente entre uno y otro año, no es propiamente factor de pura ineficiencia de quienes administran los fondos municipales, sino que el hecho se atribuye necesariamente a una falla del sistema, altamente burocratizado y que impide el desempeño práctico del manejo de cuentas, transferencias y otras alternativas de ejecución presupuestaria.
Frente a las reacciones que han surgido en uno u otro municipio, inclusive con una huelga de hambre de la Alcaldesa de Oruro, el titular del Ministerio de Economía y Finanzas Publicas salió al paso aclarando que el “congelamiento de cuentas de los municipios, es un tema administrativo y no político” y que involucra por igual a las alcaldías inclusive bajo control gubernamental, caso de la comuna cochabambina.
Con esa aclaración, sin embargo, se muestra una faceta culposa atribuible a los alcaldes, según el Ministro, empero sin reconocer que equipos de concejales que están en los gobiernos municipales resultan ser los verdaderos culpables por el atraso en la entrega oportuna de documentos, debidamente revisados y con adecuada conciliación de cuentas, estableciéndose entonces que existe “por atrás” de alcaldes, una acción definitivamente política que obstaculiza las tareas que deben cumplirse en plazos determinados.
Pero más allá del embrollo político, que quiérase o no existe en los municipios, la realidad de la pobre ejecución presupuestaria está en la vigencia de un sistema restrictivo, limitativo, ampuloso y burocrático que impide la concreción de innumerables proyectos comunitarios.
Las soluciones para mejorar la ejecución presupuestaria deben buscarse en la eliminación de muchas trabas, posiblemente en la modificación de la Ley Safco y hasta en la aplicación de normativas que flexibilicen las gestiones para encarar proyectos de desarrollo adecuados a las necesidades de cada comunidad, en función de tiempo y espacio para satisfacer las necesidades de urgencia y las de simples paliativos.
Hay que estimar que la ejecución presupuestaria conlleva una serie de pasos de orden administrativo, desde la captación de recursos, la realización de los desembolsos o pagos, los ajustes al presupuesto aprobado y las opciones de regulaciones o modificaciones en las cuentas de ejecución, lo que demanda tiempo y que generalmente falla por falta de acuerdos y reciprocidad entre los entes legislativo y ejecutivo de cada municipio.
Lo que preocupa a la comunidad es que por la baja ejecución presupuestaria no se cumplen los proyectos establecidos, muchos quedan postergados, como quedan en depósito importantes sumas de dinero, que al no ser utilizadas forman parte de otro depósito de cuentas que debería ser redistribuido en cada alcaldía para su ejecución simplificada y práctica.
Mejorar la ejecución de los presupuestos municipales es cuestión de eliminar trabas y facilitar los medios que hagan posible gastar racional y efectivamente los recursos asignados.
Fuente: La Patria
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