15 de octubre Día de las Personas con Discapacidad

Sabemos que poco puede aprender el hombre en la escuela para reconocer su espíritu paternal y lo complejo de sus deberes como padre en el hogar, es más de orden social e individual la autoridad de la madre, con dulzura y la firmeza de carácter del padre es necesario para el desarrollo y afirmación del niño.

El desarrollo social armónico, basado en derechos y deberes comunes e igualitarios, se logrará cuando todos los individuos tengamos las mismas oportunidades de explorar al máximo todas las facultades naturales y físicas.

Tenemos que aceptar como sujetos con discapacidad a toda persona que por razones fisiológicas tiene necesidad de ayuda especial para adaptarse a la existencia, debido a deficiencias mentales, visuales, sensoriales, motrices o afectivas, cuyo nivel en el cumplimiento de sus deberes es tal que los imposibilita adaptarse al medio con facilidad; resumiendo, diremos que las personas con discapacidades diferentes no son quienes sufren una enfermedad especial, son personas que tienen una insuficiencia intelectual o física que los coloca en un grupo social diferente, que impide su participación en actividades culturales, políticas, sociales, laborales etc.

Nuestros niños, jóvenes y adultos no necesitan conmiseración, menos lástima, lo que realmente necesitan es una atención prioritaria en educación, salud, deporte e infraestructura, que faciliten y compensen sus desventajas; es importante el desarrollo de las áreas cognoscitivas y afectivas, para un aprendizaje compensatorio basado en una educación integral, que ejercite y compense su discapacidad, fortaleciendo su personalidad, para lograr incluirse con sus derechos en el campo social, político etc., estos seres necesitan mayor atención en la salud, sin embargo son pocos los galenos o enfermeras que les brindan una atención con calidad y calidez.

Es necesario que las autoridades tomen en cuenta a las PCD en las nuevas construcciones de uso estatal, para eliminar las barreras que dificultan el acceso en sus diferentes accionares de la vida.

Las autoridades que tienen a su cargo la dirección o administración de estos centros de atención de niños y jóvenes con discapacidades deben tomar conciencia de la responsabilidad que asumen.

Los maestros juegan un rol preponderante en la educación de éstos niños y jóvenes; no busquemos la perfección en las acciones, tareas, manualidades, etc., comprendamos que los "niños normales", entre comillas, también se equivocan y hacen cosas incorrectas, nuestros niños necesitan comprensión amor y respeto para ser individuos útiles para la sociedad y para sí mismos.

Es importante la presencia y el aporte de los padres de familia en el proceso de educación y formación de sus hijos con diferentes capacidades, y la vida de sus hijos está confiadamente depositada en el amor, comprensión y respeto para que puedan desenvolverse con madurez dentro de sus limitaciones.

Padres y maestros quiéranlos mucho a estos niños y jóvenes, y lograrán hacer de ellos personas útiles a su familia y a la sociedad, la paternidad y educación son responsables en transmitir la vida en plenitud con responsabilidad y libertad, las consecuencias de sus acciones u omisiones ante sí mismos y la sociedad, sólo Dios los juzgará.

*Vicepresidenta de la Asociación de Mujeres de Fe Oruro Am