Los cabildos ciudadanos

Entre las opciones democráticas y en periodos electorales se consideraba el "debate" entre candidatos, como un instrumento que permita de manera abierta exponer ideas, confrontar programas, proponer planes de servicio colectivo y responder una buena parte de interrogantes que "dan vueltas" en criterios de los electores. Este sistema no funciona en el esquema actual que pasó una década de vigencia.

Sin embargo la ciudadanía y especialmente en ciertos conglomerados regionalizados, tiene sus propias alternativas que sin estar alejadas de las normativas constitucionales, se convierten en opciones de expresión abierta para formular intenciones, exigir cierto tipo de servicios y criticar o rechazar formas de gobernabilidad que atentan contra los derechos ciudadanos y alteran la convivencia pacífica. Esa alternativa toma forma y convoca a los ciudadanos demócratas a participar de las reuniones masivas que se las denomina como "cabildos" y que son parte activa de las expresiones populares.

Como el cabildo de Santa Cruz se organizan otros que se cumplirán en La Paz, se menciona también Cochabamba y Tarija, distritos en los que comités cívicos y algunas plataformas ciudadanas convocan a la ciudadanía para expresar abiertamente sus puntos de vista, casi al cierre de la programación electoral que permite movilizaciones y que no puede interferir en la decisión de un colectivo humano deseoso de exponer sus ideas y que las mismas sean "recogidas" y ojalá utilizadas por los candidatos políticos, ante la ausencia de debates entre políticos y el libre intercambio de propuestas.

El cabildo de Santa Cruz, por las características propias de la región oriental, puede constituirse en un ejemplo de práctica democrática de los derechos ciudadanos que tendrá repercusión en otras capitales de departamento, aunque sea menor el porcentaje de ciudadanos movilizados. El hecho es que la ciudadanía ha estado buscando canales de libre comunicación para llegar hasta los candidatos, pero las condiciones vigentes no son las más apropiadas para esa práctica.

En criterio de una alta autoridad de la Iglesia Católica, un cabildo abierto impulsa a la reafirmación de los valores humanos, la defensa de la vida, el respeto a la solidaridad con paz y justicia. En la observación de líderes institucionales y de varios candidatos políticos, el cabildo se presenta como una opción de relación directa entre pueblo y candidatos, lo que no es posible de otro modo, dadas las reglas de juego vigentes que están alineadas en un marco de incomunicación reinante especialmente en el uso de medios y por el otro lado en la réplica que emerge en las redes sociales, pero sin seriedad ni formalidad, por lo que el cabildo se constituye en una forma de expresión popular, con una cobertura que sale del círculo mismo de una concentración ciudadana.

Se han mencionado condiciones especiales sobre el valor de las resoluciones de un cabildo, sin embargo se entiende que las mismas constituyen determinaciones aprobadas por mayoría expresiva y por lo mismo con valor y seriedad para su cumplimiento. Sobre los resultados del cabildo de Santa Cruz un ministro de Estado puso en duda la propuesta de un modelo "federalista" al señalar que el término no está incluido en la Constitución Política, recibiendo como respuesta inmediata de una dirigente política, que tampoco está en la Constitución "la repostulación forzada" de candidatos. Una muestra de lo que implica abrir la participación ciudadana en debates libres y democráticos.

Fuente: LA PATRIA