Difundieron cultura, concretamente en el desarrollo de la lectura. Fueron seres an贸nimos que "comerciaron" con libros, enciclopedias y revistas con tem谩tica de lo m谩s variada.
La clientela 谩vida de lectura estaba asegurada, eran obreros, mineros de interior y exterior mina, empleados, profesionales, de los centros mineros dependientes de la Corporaci贸n Minera de Bolivia.
驴Cu谩ndo? 驴D贸nde? 驴C贸mo? Me abocar茅 a contar lo que viv铆 siendo parte de aquel c铆rculo.
En la d茅cada de los 70 y primer lustro del 80, trabaj茅 en tres centros mineros de COMIBOL. Deduzco que, en las otras minas estatales el fen贸meno cultural de mi preocupaci贸n, se repet铆a.
Cada mes en la fecha del pago de salarios se produc铆a un movimiento comercial moderado con la oferta de productos variados que tra铆an de Oruro, La Paz y Cochabamba.
Entre las personas que llegaban con esta finalidad estaban los "comerciantes libreros", t茅rminos que me permito utilizar, si bien al primero no lo siento adecuado por la sencilla raz贸n que, en la venta de material bibliogr谩fico no exist铆a agio ni especulaci贸n.
Con esa forma cultural de comerciar honesta y sacrificadamente sustentaron sus hogares, adem谩s de ser versados y h谩biles para presentar los contenidos del material. Era clar铆simo: 隆le铆an!
Con la platita en el bolsillo busc谩bamos al "comerciante librero". Por un lado, para ver las novedades y encargos; por otro, saldar cuentas de lo adeudado. Era una c贸moda forma de adquirir libros al cr茅dito.
A veces la deuda duraba un largo tiempo; pues, si bien 铆bamos cubri茅ndola a la vez adquir铆amos nuevo material.
La clase minera era bien preparada en temas hist贸ricos nacionales y universales, pol铆ticos, econ贸micos, culturales hasta filos贸ficos. No escatimaron esfuerzo econ贸mico para que sus hijos estudiantes tuvieran en sus manos libros, enciclopedias y revistas que contribuyeron de sobremanera en el proceso ense帽anza-aprendizaje.
Eran a帽os dif铆ciles y tensos entre mineros, la empresa y el gobierno, mediante persecuciones, apresamientos, exilios, presencia militar en los campamentos, toma violenta de las radioemisoras, torturas y otras consecuencias de vivir bajo dictaduras militares.
Una de las luchas de la clase minera fue asegurarse que la educaci贸n de sus hijos cumpla el calendario escolar sin interrupciones, tengan profesores de especialidad en cada ciclo, grado y materia, dotaci贸n de desayuno escolar, bibliotecas, material did谩ctico, construcci贸n de unidades educativas y preparaci贸n permanente, tanto did谩ctica como pedag贸gicamente de los profesores.
As铆 estuvieran en los momentos m谩s 谩lgidos defendiendo sus planteamientos las clases no se interrump铆an. Hab铆a un convenio especial profesores- empresa-trabajadores, de garantizar el cumplimiento estricto del calendario escolar.
Una excelente directora del Colegio Nacional Mixto "San Jos茅" de la ciudad de Oruro, dec铆a que la educaci贸n en COMIBOL era el baluarte de la educaci贸n boliviana.
Constituye un hecho real actualmente la presencia de una generaci贸n de profesionales bolivianos que tuvieron su base educativa en escuelas y colegios de la miner铆a nacionalizada.
No se puede pasar por alto el valor de la lectura y compra de libros que beneficiaron a chicos y grandes. De igual manera el empe帽o de aquellos "comerciantes libreros" que llegaban oportunamente con el valioso material, esperado con ansias.
*es PROFA. JUBILADA
Para tus amigos:
隆Oferta!
Solicita tu membres铆a Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edici贸n diaria disponible desde las 5:00 am.
- Peri贸dico del d铆a en PDF descargable.
- Fotograf铆as en alta resoluci贸n.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.