Incipiente normativa de calidad

En criterio de entendidos en la materia, entre estos un ejecutivo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), como también funcionarios del Instituto Boliviano de Normalización y Calidad (Ibnorca), nuestro país se encuentra en una posición incipiente en lo que atañe a la adopción de normas para asegurar la calidad de productos que son elaborados y/o manufacturados en el medio industrial boliviano.

Se dice concretamente que "Bolivia todavía tiene que recorrer mucho camino para alcanzar los niveles de participación en normas de calidad", aclarando el ejecutivo de Ibnorca que en la actualidad los productos con certificación oficial llegan sólo a 182, por lo mismo que el tema se considera marginal en nuestro país. El mismo funcionario, gerente del Instituto de Normalización y Calidad, señala que hay más de 3.000 normas bolivianas, 141 empresas certificadas en sistemas de gestión, 182 certificados de productos con sello de calidad y más de 160 servicios de inspección ofertados y por lo menos 15 mil profesionales capacitados anualmente para desarrollar la adecuación de nomas de calidad.

Una observación totalmente real y al mismo tiempo dramática, constituye el hecho de que en nuestro país, miles de consumidores de productos nacionales, sólo tienen garantía en 180 de estos, el resto se produce, vende y consume sin ninguna norma que certifique su calidad y seguridad de consumo. Se atribuye el hecho a una situación de desconocimiento de la población y al poco interés de sectores sociales por exigir sello de calidad en la mayoría de los productos de consumo masivo y diario.

El gerente de Ibnorca, lamentó que en nuestro país "el tema de la calidad todavía sea marginal, ya que tener sólo 182 productos con sello de calidad, frente a miles que hay en el mercado nacional, es reamente muy poco". Se menciona que en este caso, la directa responsabilidad de lograr una "norma de calidad", debe corresponder a los empresarios productores de cualquier rubro de alimentos o productos de uso colectivo, pero al mismo tiempo, se reconoce que el consumidor común, debería exigir el "sello de calidad" que garantiza la seguridad alimenticia y de salud ciudadana. Parte de la colectividad se preocupó en años anteriores de exigir el sello de producción nacional que se imprime en una buena cantidad de productos nacionales, "Hecho en Bolivia", pero que en ningún caso es parte de una normativa como sello de calidad.

A propósito del delicado problema, un representante del BID, en base a información expuesta sobre la materia, estableció que "Bolivia tiene una posición incipiente en la adopción de normas, en la incorporación de empresas que realicen actividades comerciales y en la adopción de normas de calidad para sus productos". Se aclaró empero que la incorporación del Ibnorca en la adopción de normas y la participación del Instituto Boliviano de Normalización y Calidad, como parte de la Organización Internacional de Normalización (ISO por su sigla en inglés), es un paso importante que permitirá en el futuro, colocar a Bolivia a la par de otros países latinoamericanos, en el control y registro de todos sus productos de uso y consumo.

Observadores del tema, señalan que desde el sector empresarial y otros institucionales, adopten la responsabilidad de concienciar a la ciudadanía en su derecho de exigir en todos los productos de consumo el "sello de calidad", como ya lo hace por ejemplo con fecha de vencimiento y la marca de "hecho en Bolivia". Es cuestión de seguridad para el gigante conglomerado de consumo masivo de productos en general.

Fuente: LA PATRIA